Introducción histórica
Su territorio fue ocupado por el pueblo astur, dada su proximidad geográfica a la ciudad de Astorga y basado en el asentamiento de la fértil vega dominada por el Castro de las «Coronas de Tardepanes”.
El pueblo astur, de escasa vida urbana, se organizaba en pequeños asentamientos llamados castros. Para formar un Castro se elegía un lugar dominante, un promontorio, al que se dotaba de defensas, murallas de piedra o terraplenes de tierra muy inclinados, y dentro se construían una serie de cabañas circulares de piedra techadas con escobas, tapines o paja.
El sometimiento, el año 19 a C., de cántabros y astures, culminó la conquista de la Península Ibérica por Roma. Doscientos años hubieron de emplear las legiones romanas en someter a la totalidad de los pueblos hispanos. Y fueron los pueblos que habitaban el noroeste de la península los últimos en ser dominados por las armas.
Razones de estrategia militar, buscando fronteras naturales infranqueables para los enemigos de Roma, fueron las exhibidas por Augusto para completar la conquista de Hispania. Pero las tierras rebosantes de oro del noroeste peninsular fueron la verdadera razón para que Roma pusiese todo su empeño en asentar en ellas sus campamentos, donde perduraron hasta la caída del imperio.
Tras la dominación, Llamas fue un importante asentamiento de los romanos quienes llamaban a la villa Valdellamas. Era paso obligado de las legiones para ir a trabajar en la extracción de oro de las médulas de Villaviciosa.
La rentabilidad de estas explotaciones de oro impuso la creación de una extensa red viaria por la que evacuar los recursos mineros, facilitando la rápida intervención militar, en caso de surgir conflictos.
Una calzada romana discurría paralela al río Orbigo cruzando el actual término de Llamas de sur a norte, hasta las inmediaciones de San Román de los Caballeros, donde se dividía en dos ramales. Uno salía del termino en dirección a Secarejo, para continuar en paralelo al río Luna y, salvando el puerto de la Mesa, internarse en Asturias. El otro, pasando por Villaviciosa, discurría paralelo al río Omaña hasta Rioscuro, desde aquí se dividía en varios ramales que facilitaban el paso a Asturias por los puertos de Cerredo, Leitariegos y Somiedo; por el ramal que cruzaba Babia de Este a Oeste, enlazaba en Puente Orugo con el ramal de Luna, facilitando el acceso a los puertos de la Mesa y Ventana.
Se unía esta calzada en Hospital de Órbigo a la que a su vez unía Astorga con León. En León, campamento permanente de la Legio VII Gemina, enlazaba con la vía que unía el campamento con Italia saliendo de España por la Junquera.
Buena parte de las actuales carreteras se asientan sobre antiguas calzadas romanas, esto es lo que sucede, en opinión del catedrático Manuel Abilio Rabanal, con la carretera que une Vilaviciosa con Las Omañas.
En “Los Fueros de León”, obra del historiador leonés Justiniano Rodríguez Fernández, conocemos una confirmación que hace en Burgos la infanta doña Blanca, en fecha 15 de julio del 1.271, de un fuero que fue dado por su abuelo, el rey Alfonso, y por la reina Elvira al Concejo de Valdellamas (Llamas de la Ribera).
Se establecen los límites de la jurisdicción, y enumera los derechos y deberes de los habitantes del Concejo, así como de los forasteros. Pero lo más importante es que por este documento se concede o confirma al Concejo de Valdellamas jurisdicción propia, libre de señorío, laico o eclesiástico, con la única obligación de pagar como único tributo o impuesto el ‘yantar’ correspondiente a la Corona. El Concejo de Valdellamas, con cabeza de concejo y capital en Llamas de la Ribera, lo completaban los lugares de: Azadón, las Omañas, Paladín, Pedregal, Quintanilla de Sollamas, San Román, Santiago del Molinillo, Secarejo y Villaroquel.
Pero la riqueza de esta ribera donde la abundancia de agua se sumaba a la fertilidad de la tierra, no podía pasar desapercibida a la codicia de la nobleza. Se desconoce la fecha en que Llamas y su tierra, el Concejo de Valdellamas, dejó de formar parte del patrimonio real para incorporarse al patrimonio señorial. En 1354 el Concejo de Valdellamas pertenecía al señorío de don Juan Alfonso de Benavides.
El año 1366 el rey don Enrique II entrega en señorío el Concejo de Valdellamas, junto con otros lugares, a Juan González de Bazán, señor de La Valduerna. Al casar doña Juana, su hija, con don Pedro Suárez de Quiñones, González de Bazán dona al Quiñones, como dote de este matrimonio, el Concejo de Valdellamas, además de el cillero de Turcia y Armellada, Velilla de la Reina y el castillo de Aguilar. Es así como se incorpora Valdellamas al señorío de los Quiñones, más tarde Condes de Luna.
Pero es en el año 1408 cuando se incorpora definitivamente al patrimonio de la Casa de Quiñones, en cumplimiento de la sentencia real dictada por resolución al litigio que por estos lugares mantuvieron doña Día Sánchez de Benavides, que los reclama como suyos, y don Diego Fernández de Quiñones I, que los hereda de su tío don Pedro Suárez de Quiñones.
Hasta la desaparición de los señoríos, pertenece el Concejo de Valdellamas al Condado de Luna, título concedido a don Diego Fernández de Quiñones II el año 1.462 por el rey don Enrique IV.
Llegada a su término la administración señorial en España para dar paso a la administración municipal, pasó Llamas a ser cabeza de un amplísimo Ayuntamiento compuesto por los lugares de: Carrizo, la Milla, Huerga, Quiñones, Quintanilla de Sollamas, San Román de los Caballeros, Villanueva de Carrizo y Villaviciosa.
Posteriormente esta extensa jurisdicción administrativa se dividió entre los actuales Municipios de Llamas de la Ribera y Carrizo de la Ribera.
Conjuntos arquitectónicos y artísticos
Las médulas de Villaviciosa (Villaviciosa de la Ribera)
A las afueras de Villaviciosa de la Ribera nos sorprende un paisaje claramente transformado por la mano del hombre. La sobrecogedora visión de Las Médulas de Villaviciosa, expoliadas por el invasor romano, el puente colgante que une Azadón a nuestro municipio en el límite del coto de Villaroquel, el Valle de Villaviciosa a vista de pájaro desde los montes que lo abrigan, parajes privilegiados para la pesca de la trucha.
La riqueza de nuestra flora y el abundante coto cinegético, donde el jabalí, la liebre y la perdiz brindan al cazador la oportunidad de disfrutar de este bello deporte.
Rutas, espacios naturales
Ruta de los Castañales
Transcurre por la localidad de Llamas de la Ribera. Tiene una longitud de 1.800 metros, estimándose una duración de 45 minutos aproximadamente para su realización completa.
Camino conocido con los nombres de «Entre paranderos» y «San Antón» debido, el primero de ellos a que transcurría entre paredes de piedra y tierra y el segundo, a la existencia de una ermita en él, en honor a San Antón, de la que no existen restos hoy en día.
Parte de la calle «Dr. Rodríguez de la Fuente» y termina en el pago de «Valdeovejas» o valle de «Valgrán». A sus márgenes derecho e izquierdo se encuentran los pagos de «La Matosa» y «´Los Barrialines» respectivamente.
A 800 metros de su nacimiento se cruza con el camino conocido como «Caminantes», transitado por aquellas personas que bajaban con animales para su compra-venta en el mercado de Benavides, existiendo una taberna o puesto que ofrecía sus servicios únicamente los jueves, que era el día del mercado.
Al final del camino, siguiendo su trayectoria dirección Norte, se encuentra el pueblo de San Román de los Caballeros, dirección Sur, a unos 200 metros, se cruza el canal, dirección Oeste, nos dirigimos al monte donde nos encontramos con el valle de Parada, con robles centenarios y donde existían antiguamente colmenares y muchas fuentes de agua cristalina que aún se conservan.
También desde el valle de Parada, a unos 500 metros, nos encontramos con la «Lagunona» que en invierno y en Primavera se encuentra con una cantidad importante de agua y en la que anidan gran cantidad de patos salvajes y otras aves acuáticas. A su vera transcurre el camino denominado «El cordel», por el que se desplazaban los rebaños de ovejas trashumantes procedentes de las montañas de Babia y que se dirigían a tierras más cálidas. Todo ello está rodeado de extensos pinares y es el punto de partida de muchas más rutas: hacia las Médulas de Villaviciosa, hacia la Cepeda…
Ruta en Quintanilla
Transcurre por la localidad de Quintanilla de Sollamas. Tiene una longitud de 1.400 metros y se tarda en completar unos 35 minutos aproximadamente.
En esta ruta podemos encontrar la Ermita de San Felipe, la cual se levantó en 1.986 en el lugar donde antiguamente había estado construida la iglesia de Bercianos, en la que recibía culto San Felipe.
Desde tiempo inmemorial, de madrugada, todos los vecinos subían en procesión a San Felipe, rezando y cantando las letanías de los Santos, pidiendo su protección y que librara sus cosechas de las tormentas y granizos. En la Ermita se celebraba la Santa Misa por los vivos y difuntos, los vecinos quedaban hasta la tarde para rezar las vísperas, se compartía la comida y con mucha alegría se despedían todos hasta el año siguiente.
Camino de Villatreros
Ruta que transcurre por la localidad de San Román de los Caballeros. Tiene una duración aproximada de 50 minutos, que es el tiempo que se tarda en recorrer los 2.000 metros que tiene la ruta.
Data de la época romana, cuando las legiones del General Casirio se encaminaban a la Villa de los Regos (Villaviciosa) para trabajar en las médulas. Unía lo que son en la actualidad las localidades de Carrizo de la Ribera y San Román de los Caballeros.
Durante la época mozárabe y mudéjar siguió utilizándose cuando la familia de Al-Masudi se traslada a Villaviciosa como gobernador de la Ribera.
Del camino de Villatreros quedan dos vestigios:
1º. Parada: Utilizado como avituallamiento para los animales, donde se les daba agua, comida y descanso para seguir el viaje, lo que convirtió el paraje en «parada» obligatoria.
2º. La fuente mora o Cienfuentes: Esta fuente era utilizada para saciar la sed de los caminantes y se transportaba a las localidades vecinas para consumo humano y para el lavado de la ropa.
Posteriormente y hasta mediados del siglo XX el camino de Villatreros era utilizado por los lugareños para ir a los mercados de Benavides y otros lugares para la compra y venta de ganado, ya que se «se abreviaba» más para llegar al destino y por ser menos pesado para los animales.
Establecimientos hosteleros
Bar RamosTeléfono:
Bar La Portería
Teléfono:
Restaurante Marcos
Teléfono:
Bar Camping Llamas
Tapas, meriendas, comidas, todo tipo de eventos.
Teléfono: 625132275
Bar Zipi y Zape
Teléfono:
Bar La Plaza
Teléfono:
Bar Buchaga
Teléfono:
Bar Cayines
Teléfono:
Bar Nori
Teléfono:
Bar Camping Quintanilla
Teléfono: 660707561
Bar Zalo
Teléfono:
Bar Los Benavides
Teléfono:
Zonas de ocio
Zona Camping
Es una zona al lado del río Órbigo, situada tanto en Llamas de la Ribera como en Quintanilla de Sollamas, con múltiples y cuidadas instalaciones para poder disfrutar de la naturaleza y el deporte.
En la zona denominada EL CAMPING, situada en la margen del río Órbigo, el Ayuntamiento ha desarrollado un espacio para disfrutar de la naturaleza y practicar diversos deportes al aire libre así como lugar de esparcimiento, relajación y recreo, tanto en la localidad de Llamas de la Ribera, como de Quintanilla de Sollamas.
Niños, jóvenes y adultos pueden disfrutar del día utilizando las instalaciones que en su mayor parte son de acceso libre. Además también es posible degustar la gastronomía regional y tomar un refresco en los bares-restaurantes que se reparten por todos los pueblos.
Canchas de baloncesto, tenis, frontón (solo en Quintanilla), fútbol sala y campo de fútbol son las instalaciones destinadas a la práctica de deportes en grupo, así como las nuevas pistas de padel, construidas en el año 2015 tras el auge de este deporte.
También dispone de amplias zonas verdes, con aparatos biosaludables, juegos infantiles para los más pequeños, una tirolina, zonas de pic-nic, rutas de senderismo, áreas de pesca y las peculiares playas fluviales que todos los años traen gran cantidad de turistas a nuestros pueblos para disfrutar de buenos momentos con familiares y amigos.
Minigolf
El minigolf de Llamas de la Ribera, inaugurado al final del verano de 2010, es una instalación para uso y disfrute de personas de todas las edades en un entorno privilegiado. Se sitúa en Llamas al margen del río Órbigo y está rodeado de zonas verdes y multitud de instalaciones de ocio y recreo como son la playa fluvial, canchas de fútbol, baloncesto, tenis, padel, parques infantiles, bar-restaurante, etc… todo ello en el emplazamiento denominado EL CAMPING.
El minigolf consta de 12 hoyos de césped artificial, que tienen formas y relieves irregulares dependiendo del nivel de dificultad. Es ideal para la iniciación al golf y para practicar tiros cortos. El minigolf permanece abierto todo el verano.
Tradiciones
El Antruejo
El domingo gordo de Carnaval se celebra en esta comarca “EL ANTRUEJO”. Tradición que se remonta a la más remota antigüedad, su origen es incierto, ritos de fertilidad del campo y celebración de la naturaleza, enfrentamiento burlesco hacia las normas de la iglesia católica y derroche de festejos frente a las cuarenta dias de cuaresma.
Esta celebración sobrepasa lo folclórico convirtiéndose en un rito mágico, pero el Antruejo que hoy conocemos, está basado en su sentido actual, en el siglo XVIII. Esta fiesta característica de Llamas en mayor o menor medida no se dejó de celebrar nunca, ni tan siquiera en el transcurso de la guerra civil y con el esfuerzo de los jóvenes en los años 70 se recupera esta tradición, formando la Asociación de Guirrios y Madamos.
Nuestro Antruejo está conformado por un conjunto de personajes, cuya misión consistía en salir a la calle recorriendo casas y pueblos limítrofes, con aire festivo y la intención de provocar el susto y la impresión entre el gentío. Desde San Antón hasta el miércoles de Ceniza todo era carnaval, permisibilidad, festejo y jolgorio.
Los Personajes más relevantes son:
LOS GUIRRIOS, entre humano y mitológico, claramente burlesco, llama la atención su tamaño y colorido, así como el estruendo que provocan sus campanas, sus abanicos, las vejigas que portan y por supuesto el vociferio y griterío . Ahora bien, la nota a destacar es la MAZCARA, un armazón de cartón en forma de cono del que sobresalen cuatro abanicos de papel o cartulina en multitud de colores, rematados con pequeños flecos de papel de seda en los laterales, centro y parte trasera. El cono esta recubierto de flores de papel y flores blancas de difícil elaboración en forma de azucena con un pequeño orificio para poder ver y respirar por el cual el rostro difícilmente se identifica, pues una media de seda lo cubre, una larga coleta de pelo natural con cinta de seda a la altura de la nuca, le da un cierto toque femenino, aunque podía ser una rememoración del pelo largo que antaño los mozos exhibían o el regalo de una gentil moza. Como instrumento amenazador la vejiga hinchada, las tenazas de madera y un rabo con el que atizar a los presentes aunque lo más característico es la cachiporra de hueso tallado. Este singular instrumento se introducía en los bolsos de los mozos que no participaban en el antruejo, aquel que lo portase invitaría al guirrio en la cantina.
Otro personaje característico son las MADAMAS, en la actualidad son mujeres ataviadas con trajes de gala de la localidad, todos confeccionados con esmerado detalle y singularidad, estas acompañan al guirrio y bailan con él. En la antigüedad recordamos al madamo, un hombre ataviado con prendas de mujer y con la cara oculta, en su baile utilizaba las castañuelas para amenazar y “golpear” a las gentes.
LA GOMIA: este personaje simula a un caballo, pues se identifica por la calavera equina que porta, en la cual su quijada es movida desde dentro del armazón asestando algún mordisco a aquel que este descuidado.
EL TORO valga la redundancia y como si de toro se tratase este personaje con cuernos y robo enviste a diestro y siniestro en ocasiones le acompaña un torero”, el cual portaba un rodao a modo de capote.
LA ROSITA: siniestro personaje con túnica de saco y un tronco de árbol hueco, decorado con pieles de caballo, sus ojos y lengua son de cochino intentando darle un aspecto de señora alta y fea. La Rosita es el personaje más solicitado por los niños para bailar.
EL DIABLO: como su propio nombre indica, el personaje va ataviado con una túnica de saco y una quilma del lino, la máscara es de madera y de considerable tamaño, está recubierta toda ella de pez, se remata con unos espectaculares cuernos de chivo y dientes en la boca, se le pintaban unos ojos para provocar aun más terror y movía su gran caballera de crines de caballo mientras asustaba y pegaba a todo el mundo con la vejiga hinchada y el rabo.
Por ultimo LOS ENANITOS, disfraz muy recurrido, gracioso y de fácil elaboración pero también característico en esta celebración de las “Carnestolendas” que en Llamas de la Ribera cobra protagonismo y es motivo de reclamo para todo aquel que quiera disfrutar y participar del Carnaval, o mejor dicho del ANTRUEJO, una fiesta única y diferente.