Es un puente medieval del siglo XIII, construido sobre el río Órbigo. Parece demasiado grande para lo que es el río en la actualidad, pero antes de la construcción del embalse de Barrios de Luna, este llevaba un gran caudal. Tiene 19 arcos y está bastante bien conservado. Se hicieron restauraciones en distintas épocas. Es monumento nacional desde 1939.

Está enclavado en la antigua calzada romana que iba desde León (Legio Séptima Gemina) hasta Astorga, que era en tiempos de los romanos la capital de la provincia Asturica Augusta.

Su nombre proviene de un famoso torneo que tuvo lugar en el Año jacobeo de 1434. El caballero leonés, Suero de Quiñones, de familia insigne, pidió audiencia al rey Juan II de Castilla para exponer una petición. El rey se hallaba por entonces en el castillo de la Mota (Medina del Campo, Valladolid) con toda su familia.

La petición era obtener el permiso para llevar a cabo un torneo especial en que tendrían que participar a la fuerza todos los caballeros que pasaran por el lugar elegido, que era el puente de Hospital de Órbigo, situado en la ruta leonesa del Camino de Santiago. Si se negaban a participar, debían depositar un guante en señal de cobardía y atravesar el río vadeándolo.

La justa o torneo tendría que mantenerse durante un mes en el que Suero de Quiñones estaría acompañado de sus mejores amigos. Don Suero llevaba colgada al cuello cada jueves una argolla metálica, como prueba de amor hacia su dama Doña Leonor de Tovar. El motivo para proponer las justas del puente era poderse librar de dicha argolla peregrinando a Santiago después de haber vencido a todos los caballeros que se presentasen en dicho puente y tras haber roto 300 lanzas a razón de tres por caballero.

El rey le dio permiso y ofreció toda clase de facilidades. Invitó a los mejores caballeros del reino a que pasasen por el camino de Hospital de Órbigo. El torneo comenzó el 10 de julio de 1434 y terminó el 9 de agosto del mismo año, día en que don Suero fue herido. Sólo hubo un descanso el día 25, festividad de Santiago. Se levantó el tinglado junto al puente y cada día se comenzaba con una misa solemne y se terminaba con un gran festín. Las crónicas cuentan que sólo hubo una muerte al cabo del mes, la de un caballero aragonés llamado Asbert de Claramunt, que recibió un lanzazo en un ojo atravesándole el cerebro.

Cuando terminó el torneo, don Suero y sus amigos se dirigieron en peregrinación a Santiago a cumplir con la promesa hecha. Don Suero depositó allí la argolla y la cinta azul que simbolizaba su amor por la dama y en la que estaba escrita una leyenda que lo atestiguaba.

En la actualidad esta cinta se halla alrededor del cuello de una imagen de Santiago Menor que está en la catedral, en la capilla de las reliquias. La argolla es una gargantilla de oro y se encuentra en el relicario del Apóstol.

Aquel torneo fue conocido como El Passo Honroso y fue narrado y cantado por muchos poetas de la época. El notario real Pero Rodríguez de Lena dejó por escrito una crónica del hecho.

Desde 1951 puede verse en el puente de Hospital de Órbigo un monolito con los nombres grabados de todos los que pelearon junto a Don Suero: Lope de Estúñiga, Diego de Bazán, Pedro de Nava, Suero Gómez, Sancho de Rabanal, López de Aller, Diego de Benavides, Pedro de Ríos y Gómez de Villacorta.

Desde 1997 el primer fin de semana de junio, Hospital de Órbigo celebra sus justas medievales del paso honroso, en recuerdo de aquella hazaña y como atracción turística declarada Fiesta de interés turístico regional.