No se tiene constancia de cómo era la iglesia antes del siglo XII. En este siglo, el templo sería de estilo Románico popular, del que posiblemente conserva las pilastras, que posteriormente fueron engrosadas.
La actual torre, es una ampliación de la existente entre los siglo XI-XII y que tendría adosada una caja de escalera semicircular, siendo ésta de caracol y con peldaños de madera.
De los siglos XII-XIV; se conserva una talla gótica de madera policromada que representa una virgen sedante, con una manzana en la mano y un gracioso niño. Se la venera bajo la advocación de la Virgen de las Candelas.
La construcción del templo actual se inicia a finales del siglo XV, principios del XVI, a costa de los feligreses. Se edificó en estilo gótico-mudar, de tipo popular. Templo amplio de tres naves y artesonado de madera. A la torre primitiva le añadieron dos cuerpos para las campanas, que se van estrechando con la altura.
En el siglo XVII, se mandaron hacer obras complementarias, el altar-retablo y se doraría y pintaría el Sagrario que posteriormente sería sustituido por uno de estilo Barroco. También se construyó una nueva capilla mayor, mas espaciosa y de mayor altura, con Zócalo de piedra, continuando el resto con tapial de barro. El retablo mayor, es de estilo Barroco con relieves dorados y policromados, con alusiones a la vida de Sta. Marina. La Santa viste túnica bermeja y manto azul oscuro y en la mano derecha porta la palma de martirio. Es una de las mejores tallas barrocas de la provincia.
Las últimas reformas acometidas han partido de donativos de los feligreses. Se han cambiado el suelo, los bancos y se han colocado la vidrieras, así como la calefacción y restaurado de las pinturas y retablos que la conforman. Contiene un pequeño museo en su interior, donde se muestran ropajes, cálices y cruces de gran valor e interés. Por los materiales utilizados en su construcción y el tamaño del templo se la ha dado en llamar: La Catedral del Barro de la Ribera.
Pero sin duda alguna su joya mas preciada sea el órgano que alberga en su interior y que fue consecuencia de los años de prosperidad vividos por la villa.